La oruga procesionaria es un parásito casi permanente en las zonas pobladas del país. Con fuerte invasión, un pino puede llevar hasta 20 bolsones, con lo que la defoliación puede ser severa.
Además, los parásitos secundarios aprovechan el debilitamiento del árbol para implantarse y proliferar, produciendo la muerte del árbol en un plazo más o menos corto.
Ello es grave especialmente en los bosques urbanizados y jardines, donde la dispersión de la plaga es favorecida al ser lugares más frecuentados por el hombre.
Los pelos urticantes producen afecciones, especialmente en los niños, acompañadas de placas rojas con escozores en la piel, en los lugares de frotación con las prendas de vestir ( piernas, cuello y muñecas ).
En las personas mayores aparecen además reacciones alérgicas más o menos severas que se pueden ir adquiriendo progresivamente por quienes frecuentan las zonas infectadas.
Ciclo Biológico
Finales de invierno:
Las orugas que se encuentran en los bolsones, los abandonan cada noche en forma de procesión cuando salen para alimentarse con tiempo no excesivamente frío.
Primavera ( Febrero – Marzo ):
Al mejorar las condiciones térmicas, las orugas descienden en procesión para enterrarse, agrupadas , en el suelo y forman el capullo.
Verano ( Julio – Agosto ) :
De los capullos en el suelo emergen las mariposas, de vuelo nocturno. La mariposa realiza la puesta de los huevos alrededor de un par de agujas formando un canutillo característico, fácil de localizar.
Otoño:
A las cuatro o cinco semanas de la puesta nacen las orugas que inmediatamente comienzan a comer las partes más tiernas de las hojas. Las orugas van siempre agrupadas en busca de comida. Se juntan en tenues bolsones, segregando hilos de seda.
Invierno :
Con la llegada del frío forman los bolsones en los lugares soleados de los árboles.
Las orugas, desde que salen del huevo hasta llegar a adultas y formar el capullo de crisálida, pasan por seis estadios y en cada uno tiene que cambiar la piel para poder seguir creciendo.
En nuestra tienda puedes encontrar un remedio para que las orugas no puedan trepar por el árbol, y así evitar la plaga y con ello la muerte del respectivo árbol.
